He dormido hasta la saciedad, el aburrimiento.
Tengo que levantarme a las 5:30 y son casi las dos.
Esta depresi�n no necesita palabras.
Sue�o con hacer una maestr�a en historia del arte
tener un sitio donde vaciar las cosas que van pasando al rededor.
Fumo porque me gusta hacerlo.
Abandono, cambio,muto, desarraigo, me muevo.
Pero NO me he vuelto m�s fuerte
Me siento <<<<
El refugio literario se va volviendo una bestia exigente y mordaz.
Las palabras puestas en cintas no sirven para nada. El haber hecho periodismo de cultura no sirve para nada. Escribir no sirve para nada. Nada de lo que soy sirve para nada. Me divierto nulificando esta megaloman�a que me corroe, este necesitar de un sentido...
y cuento ya los seis meses en Puebla y miro que alrededor s�lo pasan autos �ltimo modelo, junto a mujeres ind�genas que venden sus productos de casa en casa.
Tengo ganas de hacer locuras, de estimularme nuevamente, pero bajo otros contextos, nuevos t�picos, nuevas formas de fe y de religi�n. Dejarme atr�s y dejar atr�s conmigo muchas cosas. Como el Torito, que no creo que sea inocente, trabajar con las manos, ejercitarse en el oficio real.
Le� la antolog�a m�s reciente de narradores mexicanos... duro panorama no por la competencia, sino todo lo contrario, por la incompetencia, fuera de Bellat�n... hasta donde voy (me faltan algunos textos) nada rescatable.
Suena y sue�a, so�ar� con un �ngel encerrado en un cuerpo lleno de pelos negros, cuando lo rasuras es la cosa m�s hermosa y bella, tener sexo con �l es la salavaci�n, pero al iniciar el orgasmo surgen de nuevo los pelos en todo el cuerpo. Interrumpes por fuerza el coito y la salvaci�n se derrama mitad sobre el piso, mitad encima de sus asquerosas bellocidades. S�lo podr�n salvarse quienes puedan asociar lo m�s asqueroso a lo m�s sublime. Curarte de espanto ===> @.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario